Este lunes pasadas las 19 en Pavón y Urquiza, en San Cristóbal, familiares y amigos pidieron justicia por Adrián Continello, muerto en el derrumbe de Pavón al 3000.
La familia reclamó que la Justicia modifique la carátula de “homicidio culposo, como si fuera un accidente, cuando toda la evidencia demuestra que esto fue un asesinato”.
“La de mi hijo era una muerte evitable y el jefe de Gobierno (Horacio Rodríguez Larreta) tiene que dar la cara, porque él también es responsable de lo que pasó”, dijo Norma, la mamá de Adrián, y agregó: “Somos una familia destrozada porque nos arrebataron la vida de un hijo que estaba sano, en su casa, sin hacerle daño a nadie”.
Esteban, hermano de Adrián, llamó a “tomar conciencia de que debemos reclamar para que no nos sigan matando: pagamos para que nos maten, votamos para que nos ignoren, no somos nada para los que gobierna y ahora nosotros no sabemos cómo hacer para seguir adelante”.
En tanto, el bloque socialista de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires impulsa un pedido de informes. Entre otros puntos, solicitan saber el número de expediente de obra registrado ante la Dirección General de Registro de Obras y Catastro, cómo fue la intervención de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), qué ocurrió con las inspecciones, fecha en que se realizó la inspección previa a comenzar las tareas de excavación en la obra y datos del inspector/a interviniente. “Si durante la misma se detectaron irregularidades y, en caso afirmativo, detalle cuáles y cómo fueron subsanadas”.
El 1 de abril se produjo el derrumbe en una obra en construcción en el barrio de San Cristóbal mientras en el lugar se estaban realizando trabajos de excavación. El hecho provocó el desmoronamiento de una vivienda de tres pisos ubicada en la calle Pavón al 3000, y de un supermercado que al momento del siniestro se encontraba cerrado. A causa de ello, se registró el fallecimiento de Adrián Continello, un joven de 32 años que trabajaba de sonidista en la TV Pública y que quedó atrapado entre los escombros. Asimismo, según informaron fuentes del SAME, otras ocho personas fueron atendidas en el lugar por escoriaciones leves y crisis nerviosas.
“La Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), había presentado el pasado 4 de febrero una “denuncia de obra urgente” contra la empresa Lybster SA ante la Dirección General de Protección del Trabajo del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, debido a reiterados incumplimientos en las condiciones de seguridad laboral, señalización y protección de zanjas y excavaciones. Con lo cual, el 14 de marzo la Agencia Gubernamental de Control intimó a la empresa a remediar el problema con un plazo límite al 21 de marzo. Sin embargo, desde dicho organismo informaron que estos factores no tuvieron incidencia en el derrumbe de la obra, y que la misma se encontraba habilitada, tenía asignado un Director de obra, y contaba con un seguro”, explica el bloque socialista.
“Por su parte, la novia del joven fallecido comento a diversos medios que los/as vecinos/as habían realizado varias denuncias desde el comienzo de la obra en diciembre de 2018. Particularmente, argumentó que todas las mañanas les temblaba la casa y que llamaron varias veces al 147, a lo que siempre les respondían que era normal, y que a partir de las 7 de la mañana estaba permitido hacer todo tipo de ruidos. Debido a la gravedad del episodio es, Señor Presidente, que solicitamos la urgente aprobación de este pedido de informes cuyo único objetivo está puesto en dilucidar debidamente todas las responsabilidades por lo ocurrido y poner en cuestión el funcionamiento de los mecanismos de control estatal”, concluyen los legisladores porteños en el pedido de informes.
J.C.
Foto: Manzana66
