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ACA empezó un edificio en Pringles y Rocamora donde los vecinos piden una plaza

Habrá oficinas de 20 metros de alto.

Hay excavadoras, operarios, un montón de tierra revuelta, pero lo más importante es que hay un cartel de obra que confirma que en su inmueble de Pringles y Rocamora, el Automóvil Club Argentino (ACA) empezó a construir un edificio de oficinas de hasta 21 metros de alto. En este lote, ocioso hace 18 años, los vecinos reclaman desde hace tiempo la construcción de una plaza pública.

Los vecinos publicaron este martes en redes sociales: “Expropiar por causa de utilidad pública, artículo 17 de la Constitución Nacional. El gobierno no quiso cumplir la ley, la legislatura no quiso cumplir la ley. Expropiar significa comprar e indemnizar. Para hacer las paradas del subte H, para hacer los túneles, sí, pero para una plaza en Almagro, no”.

Este medio había publicado a mediados de 2017 que uno de los proyectos de la plataforma de participación ciudadana BA Elige era para abrir una plaza en esta esquina. A fin de año se convirtió en una de las ideas ganadoras, con más votos digitales.

Todo iba bien. La vecina autora de la sugerencia fue anoticiada por autoridades porteñas. La plaza era un hecho. Sin embargo, 48 horas después hubo otro llamado oficial. Era para decirle que en BA Elige no habían tenido en cuenta que el terreno donde se iba a hacer la plaza era privado. Entonces, todo quedaba en la nada y se suspendía el espacio verde en Pringes y Rocamora.

La bronca de los vecinos se canalizó a través de la organización. Empezaron las asambleas barriales, los pedidos formales ante distintos poderes del Estado porteño, los festivales ambientales en el espacio público. Incluso se despertó el interés de los legisladores locales, quienes presentaron numerosos pedidos de informes ante la desprolijidad de BA Elige.

En la senda legislativa, en marzo de 2018 los vecinos de Almagro presentaron un proyecto de ley en forma particular para expropiar el lote de ACA. Luego lo hizo propio el bloque socialista. Todavía no llegó al recinto de sesiones.

En el Poder Ejecutivo porteño siempre dijeron a los vecinos que había diálogo con el ACA a fin de ver que este vendiera el terreno. El jefe de Gobierno lo hizo público en una charla en vivo de Facebook. Sin embargo, nunca hubo novedades concretas.

En el verano de 2001 hubo un derrumbe por el cual murieron dos personas. Por el juicio posterior el ACA no volvió a utilizar en forma activa el terreno de Almagro. Los vecinos se quejan porque convivieron casi dos décadas con un baldío sin uso y, ahora que activaron una lucha por lograr un espacio público verde, empieza la construcción de oficinas.

J.C.

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